martes, 16 de junio de 2015

El "derecho" a enseñar los pezones en Instagram

Cuando uno abre cualquier portal de prensa en internet no para de alucinar con la cantidad de estupideces que inundan la sociedad actual. Bajo el título: "Cómo ser la mujer que Internet quiere que seas" acabo de leer lo que se podría resumir como la payasada más tremebunda de la historia. La tipa se queja de que los hombres puedan enseñar el pecho desnudo en Instagram, mientras que a las mujeres sólo se les permite parcialmente, tapando de alguna manera los pezones, so pena de que den de baja su cuenta...

Vamos como si la "libertad" en Instagram fuera algo de vital importancia. (yo me parto...)

 Y entonces se queja del "machismo atroz" que inunda esas redes sociales y de la actitud visceralmente misógina de algunos de sus usuarios masculinos. No se le puede quitar la razón en tanto que las fotos con las que ilustra el panfleto son sencillamente repugnantes.
Pero claro, los tipos que las protagonizan son el mismo tipo de enfermo que ella. Se queja de que esos misóginos la tratan como un objeto al que se puede humillar, pero "reivindica" de forma feroz su derecho a ser un objeto que puede y debe ser exhibido en la red. (curioso) Pero, claro, uno se pregunta qué es lo que pretende esta sujeta... A mi me da la sensación que le da más importancia a ser una mujer "en internet" que a ser una mujer en la vida real, que sería lo normal. Reivindica el derecho de exhibir su cuerpo en una pútrida red social como si eso fuera un acto de autorealización.

El afán compulsivo por mostrar lo bellos, cools y "en la onda" que somos y estamos merece un exámen detallado. Yo no soy piscólogo, ni sociólogo, pero me parece más que evidente que esta sociedad está ENFERMA. Hay mucha gente que confunde las chorradas que mira en su móvil con la vida real. El narcisismo compulsivo resultante de "reivindicar" un "derecho" como es enseñar las tetas (o cualquier otra cosa versión macho) en Internet es una demostración clara de una persona que vive en un mundo de fantasía.

Nada de que extrañarse, pues los que crearon internet justamente buscaban eso. Generar una cantidad suficiente de neuróticos aislados, sin ningún nexo con la comunidad ni con la vida real. Y gracias a Instagram, Facebook, Whatsapps y un sinfín de chorradas infantiloides lo están consiguiendo.

También se queja del "control" que algunas personas ejercen sobre su pareja en la red. Pero vamos a ver... si tienes pareja, y te va bien, ¿que necesidad tienes de exhibirte como una puta de escaparate de Amsterdam en un teatro virtual absurdo? No se trata tanto de controlar a tu pareja. Se trata de algo más sútil. Una persona con dos dedos de cabeza jamás va a tener una relación de pareja con alguien que exhibe sus tetas o sus biceps en una mierda de red social. Eso es por propia inercia, por propia lógica. Una persona psicológicamente normal jamás va a elegir como pareja a un narcisista con un ansia frenética por exhibir su belleza.

¿Cómo puedes confiar en alguien que padece una compulsión enfermiza, producto de una sexualidad neurótica? ¿Es que acaso un exhibicionista es alguien digno de admiración? Yo recuerdo perfectamente al exhibicionista de toda la vida, el hombre, y alguna mujer también, que, cubiertos con una gabardina, aprovechaban cualquier ocasión para mostrar sus verguenzas. Al parecer eso en la sociedad enferma actual es "normal, es "un derecho que se debe reivindicar". Me pregunto también lo que puede durar una relación de pareja si el hombre descubre a su mujer enseñándole las tetas a un vecino por el patio de luces (o viceversa en versión cilíndrica...)

Y todo esto lo publica un diario supuestamente "progre"... (sic)

sábado, 3 de enero de 2015

Señoras que confunden 'histriónico' con 'histórico'

Pues si. Lo cierto es que tomar en serio y/o en consideración a alguien que escribe mierda en las redes sociales y confunde lo histriónico con lo histórico, o en lugar de "a ver" escribe "haber" no motiva mucho. Hay gente que lo sabe muy bien: